En este artículo, os daremos algunos consejos para elegir una tarjeta gráfica adecuada para jugar al juego más popular para Steam sin dejaros un riñón en ello.
Counter Strike: Global Offensive no es un juego técnicamente puntero, su motor gráfico es Source que se desarrolló a principios de los 2000 para Half-Life 2 y con DirectX 9 en mente. Es decir, para una época en la que los programas shaders eran mucho más limitados y el concepto computación a través de GPU era todavía algo lejano. Por lo que pese a que el título salió en 2012, ya estaba pensado para equipos por aquel entonces muy modestos.
No obstante, el hecho de que se base en Source aún a día de hoy es un arma de doble filo, porque muchas de las funciones de DirectX 9 ya no son necesarias en las tarjetas gráficas actuales y con tal de mantener la compatibilidad hacia atrás lo que se busca es emularlas a través de programas shaders. También hemos de tener en cuenta que al ser un juego gráficamente muy simple, este no llega a ocupar todos los recursos de la GPU. Y es que el rendimiento de un chip gráfico por su naturaleza depende de mantener todos sus núcleos ocupados en lo máximo posible y CS:GO no es bueno para tarjetas gráficas por eso.
¿Cuál es la tarjeta gráfica ideal para jugar a CS:GO?
Lo primero que vamos a dejar claro es que no tiene sentido comprar una tarjeta gráfica con una potencia más baja que cualquier APU que pueda encontrar en el mercado, dado que es una pérdida de tiempo y dinero. El segundo punto es que no nos conformaremos solo con que el juego funcione a 60 FPS, sino que lo que buscamos es jugar a niveles profesionales sin tener que «vender nuestros riñones» en el proceso.
Nuestro consejo es que si lo que te interesa es una tarjeta gráfica para CS:GO en exclusiva entonces no mires los modelos de tarjetas gráficas pertenecientes a generaciones más modernas, sus precios están hinchados por la minería y CS:GO no aprovecha las nuevas tecnologías. ¿Qué debemos buscar entonces? Por ejemplo, puede optar por una tarjeta gráfica de gama media o alta de la serie 900 de NVIDIA como una GeForce GTX 960 con 4 GB de VRAM vais a conseguir un rendimiento por euro gastado más alto que escogiendo cualquier modelo de precio hinchado de precio de la serie 1000.
Obviamente, esta tarjeta gráfica lleva años fuera del mercado y la tendrá que conseguir de segunda mano, pero podrá encontrarla por 150 a 200 euros según el lugar donde la adquiera. Su rendimiento es un poco superior a una GTX 1050, pero saca una mayor tasa de fotogramas y suele costar entre 50 y 100 euros menos dependiendo de dónde las consigas.
Esta tarjeta nos dará la potencia suficiente para jugar a CS:GO a una resolución de 1440p y tasas de más de 120 fotogramas por segundo sin problemas.
¿Qué ocurre si tengo una mejor configuración?
Si tienes la suerte de tener equipado un PC con una tarjeta gráfica más potente, entonces no te preocupes, ya que tienes más que suficiente para disfrutar de este juego sin problemas. Aunque antes de nada hemos de recordar que la recomendación de la sección anterior es de cara a poder jugar a altas tasas de fotogramas y entrar en el competitivo del juego sin gastar mucho dinero. Claro está que hay muchas mejores opciones en el mercado, pero a tiempo de escribir este artículo no creemos que sea buena idea pagar un sobreprecio para jugar a un juego que no aproveche la tecnología que las GPU más potentes.
Así que si eres aficionado al juego de Valve y te echas largas horas en este día tras día tienes que saber que el hecho de que use un motor gráfico tan simple a día de hoy es una enorme ventaja, ya que te permite buscar en el mercado GPU de segunda mano.
